jueves, 5 de septiembre de 2013

A propósito de nadie



LA LÍNEA ESTABLECIDA




He establecido una línea muy fina entre tus palabras y mi boca. Entre mis palabras y la tua bocca embelesada. Que me miras como si no me vieras, pero como viéndome con la claridad que despierta tras de mi, y tras todas las palabras, todas las palabras de tu boca. De la nuestra, de nuestra boca que aquí es plural porque no puede ser de ninguna otra forma. Por que yo he creado una pequeña lengua de distancia entre el hueco de las manos. Entre los ojos y el perfil de tu sonrisa cuando se dibuja.

Herido de vanidad ante el mundo, te confiesas, porque no puede mentirse a un sol que nace, por que es sólo en la noche cuando mueren los hombres respetables y los niños y borrachos pueblan los puentes y los ríos.

Así es Murcia cuando la caminas en tus labios.

Me dices que hay esquinas de muchachas hambrientas, curvas que yo no había visto antes de todas esas farolas apagadas; e hilo, trenzo, tejo un cúmulo abstracto de ideas estúpidas sobre chicos en cuclillas que quieren palpar huesos de hielo.

He construido un muro tan ligero, tan fino y transparente, que casi es irrompible; por que son esa clase de muros, los que parece que van a quebrarse, aquellos que persisten al relente de Murcia y su pecado.

Por que este “no hacer nada”, el de tocarte y no, el de besarte y no, y besarte más. El de la espera. El de que esperes. ¿Qué esperas? Esperas, que lo sé. Esperas que sea mi gesto el que apremie al diablo, el que le diga NON SERVIAM; Non Serviam tampoco a ti, triste Mefisto. Parece que con la hoz titilando en los dedos de otro la muerte no podrá culparte. Pero ¡Oh! La muerte si es deseo culpa a todos. A todos, querido amigo al otro lado.

Sigues bajando la escalera de piedra, que ahora parece un desierto en el que esta el silencio de tu voz ahorcada. Me brillan las pupilas- será la luna- de tanto pensar que sé que piensas, que lo intuyo y ni tu alma es parecida a lo que yo pueda palpar. Se de ti. No se nada. Pero se de tu cuerpo esbelto como sombra de abeto, se de la fuerza de tus nudos, del celta de tu rabia. Del pecho que no he visto nunca. 

Se que hay lanzas donde están las cicatrices aún.

Se que se abren, y se que hay monstruos que podríamos compartir en otra madrugada. Se que hay taras, se que hay miedos, se que eres un hombre y que soy una mujer y que mis pechos son duros y tus brazos son venosas ramas que pueden golpear y acariciar y lamer sexos.
Se que sabes que crees que no se, o que se o creo saber o no se nada. Se que hay palabras de azúcar, palabras de limón, amarillas palabras dónde están nuestros pies cayendo en El Cuartel y la risa sempiterna. Hay vecinos que aún se asoman al balcón por que envidian la compañía de dos híbridos intentando dibujarse; que añoran un cigarro acompañado, un humo para poder inhalar desde una casa ajena.

He contemplado la muralla de aire, y cuando exhalo pienso que se esfuma, y un momento me digo: ¡Ahora! ¡ahora!¡ Date prisa!, ¡Blande tus armas!¡Rompe, muerde dulce su boca y que no gima si no es por que ha caído! ¡Bate todos los poemas!, Que descubra- dijo Whitman- el origen en la savia de tu tacto. Que el orgasmo se produzca con la sierpe corrompiendo su alma ya corrupta. ¡Devuélvele la juventud, muestra su ataúd, enséñale la vida! Que respire la fuerza antes de que vuelva la pequeña franja, antes de que el aire recomponga todos sus cristales.



Palabras, palabras... Línea. Muro. Fondo. Trago. Oscuro y mudo; me sobran a veces todos los abrazos. Por que hay distancias que no se pueden acortar con una historia, por que hay edificios tan livianos que no podrán caer jamás. Tus palabras y mi boca. Mi boca. Tu boca. Las palabras. Las...


25/6/2013  Akata.




"Tienes rostro de piedra esculpida,
sangre de tierra dura,
viniste del mar.
Todo lo acoges y escudriñas
y rechazas
como el mar. En el corazón
tienes silencio, tienes palabras
engullidas. Eres oscura.
para ti el alba es silencio."

C.Pavese



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